Desde luego, como fui a Mexico, la impresión cultural es rara, ya que tienen muchas cosas que se hacen muy parecidad a Argentina, por donde fui en 2007, pero también hay muchas otras que nunca te imaginarías que son diferentes. Siempre hay cosas que se pueden encontrar mejor en Alemania, como por ejemplo la comida, que creo que todos alemanes la extrana cuando sale de su país, pero eso no le quita lo bueno a la comida mexicana. Ya llegué a un punto de haber acostumbrarme de la comida mexicana, después de algunos problemas que tenía mi estómago al principio.


En cuanto a conocer gente, hasta ahora casi siempre los primeros que conocí son mis companeros de la universidad o de otras escuelas y los del departamento. Es algo común creo que la gente que va de intercambio termine al principio conociendo a casi puros estranjeros, lo cual en mi caso no es la excepción. Esecialmente los franceses me llaman atención, que casi me parece que haya una nueva conquista francesa!! ;-)

En Guadalajara llegué a una ciudad donde no conocía absolutamente a nadie antes, no tenía ningún contacto en la ciudad, salvo una amiga de la carrera de los estudios de Latinoamérica que había tomado también Guadalajara para realizar un semestre de intercambio. Esto significar empezar prácticamente de nuevo. Pero como me iento tidavía totalmente perdida, se resultó una de las mejores actividades que puedes hacer cuando no conoces el lugar donde estás: pasear por la ciudad e ir descubriendo cosas nuevas cada día, charlando y preguntando con gente distinta. Asi algunas cosas las descubrí yo solo, a prueba y error, y otras las aprendí por los conocidos que estoy haciendo. De lo que hablo son cosas sencillas, como dónde comer o hacer las compras, que museos y atractivos visitar, dónde poder ver los mariachis, que opciones de cine hay, dónde salir por la noche, etc. y asi se aprende mucho de la historia y cultura del lugar y del país.

Este semestre tengo la oportunidad de realizar un intercambio estudiantil en el extranjero, que es mi quinto semestre y obligatorio para hacerlo en cualquier país de Latinoamérica. Para lograr irme, pasé un semestre completo de papeleo y en la oficina de revisión, en el cual todos los que participan en un programa de intercambio tienen que buscar a donde piensan ir, entregar todo una serie de documentos, y cumplir algunos requisitos de promedio y créditos cursados. Luego, una vez admitido en la universidad destino, viene toda otra serie de cosas que hacer, como lo es buscar un piso, tutores, vuelos, y todo lo que es imaginable.